Resumen de articulo elaborado por Creix Centre
Desenvolupament infantil. Palma de Mallorca. DISFAM Association familia y
dislexia.
La definición generalizada de dislexia hace
referencia a “un trastorno que se manifiesta por la dificultad para el
aprendizaje de la lectura aunque tenga una educación convencional, una
inteligencia adecuada y oportunidades socioculturales. Depende fundamentalmente
de alteraciones cognitivas el origen del cual es frecuentemente constitucional”.
Por tanto es un trastorno crónico, de origen neurobiológico, y que afecta de
manera más significativa durante la etapa escolar, si bien persiste hasta la
edad adulta
Según el DSM IV
El término dislexia
pasa a codificarse como Trastorno de Lectura y requiere lo siguiente:
u A. El rendimiento en
lectura, medido mediante pruebas de precisión o comprensión normalizadas y
administradas individualmente, se sitúa sustancialmente por debajo de lo
esperado dada la edad cronológica del sujeto, su cociente intelectual y la
escolaridad propia de su edad.
u B. La alteración del
criterio A interfiere significativamente el rendimiento académico o las
actividades de la vida cotidiana que exigen habilidades para la lectura.
u C. Si existe un déficit
sensorial, las dificultades para la lectura exceden las habitualmente asociadas
a él.
Son dos los aspectos a añadir a esta
definición, una es la edad mental del sujeto y la otra su historia vital. Los
trastornos de aprendizaje (entre los que se incluye la dislexia) deben
diferenciarse de las variaciones normales de rendimiento, así como de la falta
de oportunidades escolares o factores culturales. El trastorno del cálculo y el
trastorno de la expresión escrita se presentan frecuentemente en combinación con
el trastorno de lectura.
NIVELES DE AFECTACIÓN EN DISLEXIA
Primer nivel 3 y 6 años
u En el lenguaje y en el
habla: dificultades
expresivas, problemas de articulación, vocabulario pobre, expresión verbal
baja, confusión en palabras con producción similar. Pueden presentar retraso
del lenguaje y muchos de ellos si no llegan a cumplir criterios como tal,
presentan retraso en la adquisición de las primeras palabras y/o frases.
u En los aprendizajes: dificultades para
identificar los sonidos y asociarlos a las letras (procesamiento fonológico
alterado); dificultades para aprender a escribir y reconocer visualmente su
nombre y el de sus compañeros; su capacidad para otras áreas no se corresponde
con la capacidad que tiene al enfrentarse al mundo de las letras; problemas
para integrar colores, formas, tamaños, medidas; dificultades para orientarse
temporalmente; dificultades atencionales y de concentración; escritura
persistente en espejo al final del nivel; historia familiar de problemas de
lectura y escritura.
u Motriz y espacialmente:
retraso
en la estructuación y el conocimiento de propio cuerpo y del esquema corporal;
dishabilidad motriz fina y/o gruesa; dificultades o ausencia en la integración
de la lateralidad (izquierda-derecha), nociones espaciales como delante-detrás,
arriba-abajo, dentro-fuera; lentitud en la ejecución; pobre habilidad
grafo-manual; figura humana por debajo de lo esperable por edad.
Segundo nivel
u En el lenguaje y el
habla: dificultades
articulatorias; dificultades de acceso al léxico; expresión verbal pobre;
dificultad para integrar nuevos vocablos; dificultad para utilizar adecuadamente
los tiempos verbales, para expresarse y/o para explicar un episodio con
coherencia.
u En los aprendizajes: Dificultades en la
integración de las tablas de multiplicar; dificultades en la integración de
secuencias; problemas en la adquisición de las nociones espaciales y temporales
(días de la semana, meses, estaciones, horas); dificultades atencionales y de
concentración; problemas para dominar el reloj analógico.
u Motrizmente: dishabilidad motriz;
coordinación manual y gruesa baja; tonicidad alterada, por exceso o por
defecto; lentitud en la ejecución de actividades; problemas posturales;
dificultades en la coordinación de secuencias de movimiento; al mismo tiempo,
continuan presentando dificultades en la integración del esquema corporal y en
la distinción derecha/izquierda; tendencia a la dispersión; dificultades en la
integración de secuencias que implican más de dos movimientos y/o en la
integración de más de dos órdenes.
u En la lectura: errores de ortografía
natural caracterizados por omisiones de letra o de palabra, adiciones,
inversiones, vacilaciones y/o repeticiones; también puede cometer errores de no
lectura; la dificultad de decodificación le provoca una lectura muy vacilante y
lenta, con falta de ritmo; alto grado de malestar ante la tarea de lectura en
voz alta; no respeta signos de puntuación; dificultad notable en la comprensión
lectora; mucha dificultad en la lectura de palabras no conocidas y/o
pseudopalabras.
u En la escritura: errores de ortografía
natural caracterizados por omisiones de letra o de palabra; sustituciones,
adiciones, rotaciones, inversiones, uniones, fragmentacines; errores de
ortografía arbitraria caracterizados por cambios consonánticos, omisión de
letra muda; omisión de acentos y de puntuación; alteraciones del grafismo,
dificultades de integración de la letra ligada; mezcla de mayúsculas y
minúsculas; dificultades en la estructuración sintáctica, con frases pobres,
con poca conexión y tendencia a la enumeración.
Tercer nivel de 9 a 12
años
u En el lenguaje y el
habla: dificultades
para elaborar y estructurar frases correctamente; dificultades de acceso al
léxico; dificultades para expresarse en términos precisos; dificultad en el uso
de tiempos verbales; pobreza expresiva; baja comprensión verbal.
u En los aprendizajes: dificultades
atencionales y de mantenimiento de la concentración; dificultad en el
aprendizaje de lenguas extranjeras; dificultades de orientación espacial y
temporal; problemas de orden organización de tareas.
u Motrizmente: Dishabilidad motriz;
bajo umbral de fatiga; contracturas por tensión muscular; dificultad de
coordinación en secuencia de movimientos precisos; dificultades en la
integración de órdenes complejas que implican secuencias de movimientos.
u En la lectura: la lectura tiende a ser
vacilante, mecánica y arrítmica; se mantienen las dificultades en el proceso
semántico (en la comprensión de textos).
u En la escritura: caligrafía irregular,
poco elaborada; dificultades en la integración de la norma ortográfica,
persistiendo los errores de la ortografía arbitraria; dificultad en la
estructuración de frases; falta de vocabulario.
Apoyos e intervención para
niños que presentan dislexia
Desde la escuela tener
en cuenta:
u Integración del niño
dentro del grupo clase
u Reacción hacia el medio
escolar
u Adaptación general
u Comportamiento y
rendimiento
u Cuál es la percepción
del nivel intelectual del niño y de las capacidades asociadas como déficits
atencionales, inestabilidad emocional, etc.
Principios metodológicos
Propuestos por Dislexia Action UK.
Se defiende un
aprendizaje estructurado, acumulativo, significativo, partiendo siempre de lo
que ya conoce el alumno para, lentamente y de forma progresiva ir aumentando la
complejidad de las tareas, y un aprendizaje multisensorial (vivencial, próximo,
activo). La metodología que se pretende utilizar se caracteriza por ser
flexible, con participación activa de los alumnos e intentando conseguir los
objetivos planteados a partir de actividades lúdicas para motivar a los jóvenes
hacia el aprendizaje. Es recomendable que en las sesiones haya variedad de
ejercicios y actividades, intentando siempre iniciar las sesiones con diálogo,
y finalizando con algún juego o actividad gratificante para el alumno.
Intervención en el aula
Un trabajo coordinado,
común e interdisciplinar entre la familia, los profesionales externos y el
centro educativo es esencial para conseguir los mejores resultados de
intervención con un alumno disléxico. Aquí se tratará de delinear la
importancia de una sensibilización, y de una metodología e intervención
específica para atender las necesidades educativas del alumno disléxico en el
aula, asegurándolo de este modo el éxito escolar.
Aula sensibilizada
La falta de información
y conocimiento sobre la dislexia son dos de las mayores barreras con las que se
enfrentan las personas disléxicas día a día. Si establecemos como objetivo
informar y sensibilizar a las futuras generaciones es indispensable que se
empiece a tratar el tema dentro del aula, asegurando que tanto educadores como
cada uno de los alumnos dentro del sistema educativo actual, empiecen a
entender al alumno disléxico y a aceptar sus diferencias.
Teniendo en cuenta que
la dislexia es una forma diferente de aprender, tanto los alumnos como los tutores deben entender que
existen tres vías distintas de aprendizaje:
Visual, Auditivo, Kinestésico
Aula multisensorial
Dado que cada niño
aprende de una manera diferente, es fundamental variar la metodología utilizada
dentro del aula, adaptándola a los estilos de aprendizaje de cada uno de los
alumnos.
“Una enseñanza
multisensorial es una enseñanza en la cual los canales sensoriales son
estimulados de forma simultánea, optimizando y enriqueciendo el proceso de
aprendizaje de todos los alumnos.” (Gómez & Sancho, 2007) Dado que cada
niño aprende de una manera diferente, es fundamental variar la metodología
utilizada dentro del aula, adaptándola a los estilos de aprendizaje de cada uno
de los alumnos.
“Una enseñanza
multisensorial es una enseñanza en la cual los canales sensoriales son
estimulados de forma simultánea, optimizando y enriqueciendo el proceso de
aprendizaje de todos los alumnos.” (Gómez & Sancho, 2007)
En el momento de
aplicar esta metodología en el aula, es importante tener en cuenta las cuatro
modalidades de la metodología multisensorial propuestas por Walker &
Brooks, (1996). Así, cada actividad deberá estar formada por un componente: Visual
(mirar), Auditivo (escuchar), Kinestésico manual (manipular), Kinestésico oral
(hablar)
Aula adaptada
u Horarios visuales
u Autoinstrucciones (para
la organización del pupitre o como recordatorio del material que debe llevarse
a casa cada día)
u Rincones/áreas de
audición (cuentos grabados – Broomfield & Combley, 2003)
u Rincones de
comunicación (áreas de “role play” para estimular el lenguaje oral) o de
desarrollo emocional, social y personal (mural de sentimientos, etc.).
u Murales tanto
decorativos com interactivos. El primero tendrá como objetivo desarrollar la
autoestima del alumno (presentando el trabajo de la manera más atractiva
posible) y el segundo, se utilizará para presentar el material de estudio de
una forma visual, interactiva y multisensorial (cambiando el mural en función
del tema que se esté estudiando en ese momento).